Diez ciudades industriales caminan juntas hacia la transición verde en Europa

Las 10 ciudades integradas en la red URBACT In4Green cooperarán los próximos 2 años en el diseño de soluciones locales a los desafíos de la transición industrial.

Las 10 ciudades que formar parte de la red URBACT In4Green se han beneficiado en el pasado del desarrollo de la industria, que ha ofrecido trabajos bien remunerados y oportunidades de negocio a su ciudadanía. Sin embargo, el cambio climático, la globalización y el desarrollo tecnológico está poniendo en apuros a las empresas industriales de estas ciudades europeas. Muchas han tenido que cerrar o han reducido en gran medida su actividad y sus plantillas. En ciudades donde un 35% de la población trabaja en este sector el impacto es muy negativo. 

Las ciudades de la red In4Green quieren avanzar en la transición verde, reduciendo sus emisiones contaminantes y mejorando la calidad de vida de su población. Y para ello, necesitan transformar, reforzar y adaptar sus sectores industriales, un proceso que necesariamente tendrá un significado distinto en cada ciudad, pero enfoques y soluciones que pueden ser compartidas y replicadas.

Solingen: la ciudad de los cuchillos. 

En Solingen, una ciudad alemana cercana a Düsseldorf, se producen los mejores cuchillos y espadas desde hace más de diez siglos. El 90% de las empresas alemanas de cubertería tienen su sede en esta ciudad, donde también hay una importante presencia de otros sectores industriales como la galvanización. Elke Moosbach es CEO de la empresa centenaria Moosbach & Kanne Electroplating Company, una pyme que ha conseguido reducir su huella de carbono un 45% en los últimos años invirtiendo en eficiencia energética, ahorrando hasta 500.000 € en energía. “Nuestro mayor desafío es cómo obtener calor en invierno con fuentes renovables, especialmente desde que el precio del gas natural se disparó por la guerra de Ucrania” señala la Dra. Moosbach. Su empresa tiene un proyecto para un sistema basado en biogás con recuperación de calor y alta eficiencia, que podría contribuir a los objetivos europeos de transición verde en la industria, pero la inversión es muy elevada y es muy complicado acceder a las ayudas.

Avilés: la ciudad de la innovación.

Víctor Fernández trabaja en Avilés Empresas desde hace más de 20 años ayudando al tejido empresarial local a adaptarse a los nuevos desafíos de la transición industrial. Nació en esta pequeña ciudad del norte de España y recuerda el olor y la niebla en el aire generada por la industria del coque y el acero. Víctor asegura que “no es un recuerdo negativo, al contrario, lo recuerdo con añoranza. Aquí tenemos una fuerte vinculación con la industria, porque todos tenemos un familiar que ha trabajado en ENSIDESA”. La Empresa Nacional Siderúrgica, S.A. (ENSIDESA) fue una gran empresa pública española que contó con una planta de siderurgia integral en Avilés. Dicha planta significó la transformación urbana, económica y social de la comarca de Avilés y se convirtió en la mayor siderúrgica de España. En la actualidad sus instalaciones conservadas en activo pertenecen a la multinacional ArcelorMittal, cuyo principal centro de I+D+i está ubicado en Avilés, gracias a la cooperación con el Ayuntamiento que ha cooperado en la creación de 12 centros de I+D+i público-privados. 

Dąbrowa Górnicza y su Zona Económica Especial.

ArcelorMittal tiene otra fábrica en la ciudad polaca de Dąbrowa Górnicza. “Hace décadas esta fábrica daba empleo a 50.000 personas, pero con el cambio en los procesos industriales y la actividad de la planta, ahora solo trabajan 5.000” asegura Ewa Fudali-Bondel, Responsable de la Oficina de Desarrollo y Asistencia al Inversor del Ayuntamiento de Dąbrowa Górnicza, una ciudad de tamaño medio ubicada en el área metropolitana de Katowice. La reducción de la plantilla en la planta de acero llevó a apostar muy fuerte por la creación de una Zona Económica Especial a las afueras de la ciudad. El Ayuntamiento compró los terrenos y adelantó las inversiones y la construcción de infraestructuras. “No fue fácil convencer al gobierno local para que aprobara el proyecto, pero ahora estamos empezando a ver los resultados con las primeras empresas tecnológicas instalándose en nuestra ciudad”. Sin duda un caso de éxito en atracción de inversión. 

Sabadell y su industria textil.

Joan Arnau es propietario y CEO de la empresa Hilaturas Arnau en Sabadell, España, cerca de Barcelona. Esta empresa familiar de tercera generación lleva más de 75 años produciendo hilos de alta calidad para marcas como Burberry. La deslocalización de la industria textil ha obligado a la empresa a reinventarse: “Ahora trabajamos con nuevas fibras técnicas recicladas como las para-aramida, procedente de chalecos anti-bala en desuso, para la producción de hilos y tejidos técnicos destinados a usos industriales y de protección”, explica Joan. Así, además de mantener la actividad industrial, contribuyen a la economía circular del sector textil.

Famalicão protege su industria.

Augusto Lima es concejal de Desarrollo Integrado, Economía y Emprendimiento en el Ayuntamiento de Vila Nova de Famalicão, una ciudad portuguesa mediana situada cerca de Oporto. La industria textil siempre ha sido muy importante para esta ciudad: “durante la crisis económica nos resistimos a perder nuestra industria, a pesar de que nos recomendaban reconvertir nuestra economía hacia una economía basada en los servicios” asegura Augusto. Gracias a los esfuerzos del Ayuntamiento han conseguido mantener y reforzar este sector. Fruto de este esfuerzo nació CITEVE, un centro de I+D+i del textil, que actualmente está trabajando en la circularidad de la industria a través del proyecto BE@T, en el que investigan cómo reciclar pantalones vaqueros, creando hilos para hacer vaqueros nuevos, o el empleo en el sector de materias primas como corteza de pino, cúrcuma, corcho o ramas de vid. Aquí son capaces de convertir cualquier desecho orgánico de otras industrias en hilos para hacer tejidos, no solo para fabricar ropa, también para el sector de la automoción, la aviación o la seguridad.

Detener la pérdida de población en Žďár nad Sázavou.

Martin Mrkos es alcalde de la pequeña ciudad checa llamada Žďár nad Sázavou. En 1990 esta ciudad llegó a tener unos 30.000 habitantes gracias al desarrollo de la industria. En la actualidad no llega a los 20.000, habiendo perdido un tercio de su población en 30 años. Según el alcalde “somos una de las llamadas ciudades en declive. Nuestro desafío es ofrecer las mejores condiciones de vida para retener a la población y atraer talento e inversión”. Las nuevas generaciones de Žďár nad Sázavou ya no están interesadas en las oportunidades laborales que ofrece la industria local. Muchos se mudan a estudiar en las universidades de Praga y Brno para no volver. Y los pocos que vuelven se instalan en los pueblos cercanos donde la vivienda es más barata y más atractiva al ser de tipo unifamiliar. Parque para el Futuro es una nueva zona industrial a la que pretenden atraer a empresas del sector tecnológico, además de tener planes para ofrecer itinerarios de formación profesional atractivos para ofrecer nuevas oportunidades a los jóvenes sin tener que salir de la ciudad.

Un reto común mayúsculo.

Estas son solo algunas de las historias de las ciudades que forman parte de la red URBACT In4Green y que quieren construir un nuevo futuro verde para sus ciudades y sus habitantes, sin renunciar a su sector industrial. Estas seis ciudades comparten desafíos con Salerno en Italia, Larissa en Grecia, Bijelo Polje en Montenegro y Navan en Irlanda, que también forman parte de la red, y con las que quieren descubrir y explorar soluciones e intercambiar buenas prácticas.

El reto es mayúsculo y pasa por descarbonizar y digitalizar el sector industrial, reforzar la innovación, aumentar la circularidad de la economía, adaptar la ciudad y sus infraestructuras al cambio climático, apoyar a las pymes locales, así como capacitar y formar a los trabajadores. Un reto imposible de abordar para un ayuntamiento por si mismo y que requiere la implicación y la colaboración de otras autoridades públicas, del sector privado, del sector académico y del sector civil.

Las diez ciudades que forman parte de la red URBACT In4Green están empezando a recorrer un camino conjuntamente que, sin duda, van a tener que recorrer muchas otras ciudades en Europa en los próximos años.  

URBACT In4Green es una red financiada por la Comisión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).